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Si te causa muchos problemas encontrar unas gafas de natación perfectas, ten en cuenta estos consejos para saber elegir la mejor opción ya sea para piscina o aguas abiertas.
Cuando vas a nadar, las gafas de natación es un accesorio imprescindible, pero hay que saber elegir la opción correcta porque puede marcar la diferencia. Si hay algo que puede arruinar cada entrenamiento ya sea en la piscina o en aguas abiertas, es unas gafas en las que entran agua a la primera de cambio, que si se empañan continuamente o se desajustan cada dos por tres. Esto se puede convertir en una auténtica odisea. Por eso, a la hora de decantarnos por unas gafas de natación hay que tener en cuenta una serie de características.
Como has de saber, la natación es totalmente compatible con el running. Al ser un deporte cardiovascular y de bajo impacto, es perfecto para los días de recuperación o incluso para seguir haciendo ejercicio cuando estás sufriendo una lesión muscular. Nadar tiene también otros grandes beneficios para los corredores como desarrollar unos músculos más fuertes o a romper la rutina si te encuentras en un momento de decaída y sin ganas de salir a correr.
En primer lugar, el tipo de gafa: suecas (pequeñas, ligeras y gran ajuste, resistentes y suelen ser la opción más usada); de puente fijo (su uso es más extendido, especialmente entre triatletas, por su comodidad y amplia visualización): o de puente intercambiable, que tienen las mismas funciones, pero lo único que las diferencia es que las lentes son independientes una de otra para así adaptarse mejor al puente de la nariz; o de máscara (son mucho más grandes pero en cambio ofrecen mucha más comodidad y fijación y suelen usarse para bucear o hacer submarinismo). Esto es importante porque hay que tener en cuenta tanto el tamaño y como que se ajusten perfectamente para evitar que se cuele el agua. Por eso, hay que asegurarse de que se sujetan perfectamente con la propia presión de las gafas, así como también de que el faldón se adapta a la forma de la cara correctamente.
Por supuesto, también hay que tener en cuenta el escenario. Es decir, si las vas a usar en piscina o en aguas abiertas. Mientras que para nadar bajo techo debes descartar aquellas gafas de natación que tengas lentes oscuras porque reducirán la claridad tanto por encima como por debajo del agua. Por tanto lo aconsejable para piscina es unas gafas que tengas los cristales totalmente claros. Además, tanto para piscina como mar debes asegurarte de que la lente lleve un tratamiento antivaho para evitar que no se empañen, aunque exista los típicos sprays que ayudan a que no se empañen, y te fastidien los entrenamientos. Mientras que para nadar en un mar abierto, como pueden ser los triatletas, es preferible elegir aquellas que te permitan ver clara y ampliamente debajo del agua, que ofrezcan un buen ajuste y, opcionalmente, que incorpore protección contra los rayos ultravioletas y cristales de espejo porque así reducirás a la cantidad de luz que entra a través de ellas.
Por eso, te proponemos varios modelos teniendo en cuenta cada una de estas características y así puedas elegir las gafas de natación que más se ajusten a tus necesidades.
Son una de las gafas de natación más populares. Aunque están diseñadas principalmente para nadar en piscina, también se pueden usar para aguas abiertas. Y es que sus lentes ofrecen protección UV y película antivaho, tiene el puente de la nariz totalmente autoajustable, la correa dividida o fabricada sin PVC para evitar cualquier tipo de reacción alérgica.
Este modelo de gafa se presenta con una innovadora tecnología de sellado para evitar que el agua entre, gomas totalmente personalizables y con gran sujeción y unas lentes higroscópicas que permiten una amplia visión y su efecto espejo reduce notablemente los reflejos. Por su combinación de características, las Fastkin Elite Mirror es una opción perfecta para triatletas que nadan en aguas abiertas.
Estas gafas de natación son de puente fijo y es otra opción para nadar en aguas abiertas. El motivo está en sus cristales que además de ofrecerte una polarización especial, protegen tus ojos de los rayos UV a la vez que te ofrecen una clara visión. Además, están fabricados con policarbonato por lo que has hace aún más resistentes.
Tanto si estás entrenando para un triatlón como para tus entrenamientos semanales en piscina, estas gafas de natación pueden ser una opción correcta. Y es que estas gafas están diseñadas bajo la tecnología exo-core, que te brinda durabilidad y resistencia al uso constante. Además, están fabricadas con materiales para ofrecerte una máxima comodidad, rigidez y ajuste para utilizarlas en entrenamientos diarios.
Si sueles nadar en piscina y nada más, estas gafas de Speedo son perfectas. Incorporan cristales higroscópicos para una visión máxima sin tener que mover la cabeza, además son cristales que reducen los brillos y reflejos del agua. Los puentes de la nariz son intercambiables para un ajuste totalmente personalizado y con protección antivaho.
Diseñadas para que puedas surcar los mares de la mejor forma. Estas gafas de la marca australiana Zoggs son una de las más usadas por triatletas o nadadores de larga distancia. Las lentes son totalmente polarizadas por lo que aunque el sol brille no será tu peor enemigo en la competición. Tampoco que tengas que estar pendiente de si entra agua o se empañan por el vaho porque ofrecen una sujección perfecta.
Es uno de los modelos más ligeros, apenas pesan 60 gramos. Pero no es lo único por lo que destaca estas gafas de la marca italiana Cressi que aunque tiene un diseño totalmente transparente, sus lentes ofrecen protección a los rayos UV así como también a los roces y antivaho. Además, su puente es intercambiable y sus gomas ofrecen una gran sujección.
Estas gafas de natación destacan principalmente por su sujeción, ya que la hebilla elástica te permite que se ajuste fácilmente para que no entre agua, así como también la goma de ajuste que es totalmente plana. Además, el faldón está diseñado en 3D para un mayor sellado.